ALGO NUEVO SOBRE LO VIEJO (I)
Como he contado varias veces en diferentes lugares, creé la primera versión de Drímar a principios de los años ochenta, siendo un adolescente delgaducho de pelo largo, chaleco vaquero, botas camperas y gafitas redondas a lo Lennon que, en el entorno del colegio de los jesuitas de Gijón, parecía bastante fuera de lugar. En algunos